Venres. 29.03.2024
Los galardonados locales de "Feitizo" y el emotivo homenaje audiovisual a "Geri", los momentos más destacados

Adiós a la quinta y más segura edición del FIC en una gala... ¿que no lo fue?

Muchos ausentes a la hora de recibir los galardones, aunque el que más en falta se echó fue el premio especial del certamen, "Geri" Fernández, el joven verinense que este año tuvo sus tres minutos de merecida gloria porque su padre quiso recordar su figura elaborando la talla que premió al mejor corto elegido por el público: "Feitizo"

Todo quedó en casa esta vez dentro de la categoría del Premio del Público: Patricia Porto y Álex González recibieron el galardón de manos de su autor, el artista de la madera Gerardo Fernández.
Todo quedó en casa esta vez dentro de la categoría del Premio del Público: Patricia Porto y Álex González recibieron el galardón de manos de su autor, el artista de la madera Gerardo Fernández.

Quizás porque se temía que en cualquier momento debiese interrumpirse -por orden de la autoridad sanitaria- la celebración del festival, los guionistas quisieron este sábado plantear, como argumento de presentación para la gala de clausura de la quinta edición del festival de cortos de la villa de Verín, no un certamen de entrega de premios al uso sino más bien el ensayo del mismo. Iria Sobrado ejerció de maestra de ceremonias arrancando no pocas sonrisas a los presentes y lanzando, puede que también por su otra faceta profesional, algún dardo envenenado a la Consellería de Educación y a su política restrictiva en materia de personal a pocos días de dar comienzo las clases. Amenizó la poco más de una hora de velada la banda del ya fijo en los carteles del FIC, el productor, arreglista y compositor Xavier Vaz, quien contó, en la apertura de la gala, con la colaboración a los teclados del verinense Jorge Godás en la interpretación -también de contenido audiovisual- de una de las composiciones que, por un momento, trasladó al público hasta la ciudad rusa de Mirni, en la que el artista local había presentando su nuevo trabajo. 

Premio especial para "Geri"


Por las ya conocidas restricciones fijadas, la presencia de público y de responsables de las diferentes producciones participantes en el festival estuvo muy acotada. En todo el auditorio no se superaba el centenar de butacas ocupadas y lo que antaño era un animado photocall, en el de la quinta edición se dejaba entrever la tensión que suponía posar para una cámara sin guardar la mínima compostura en lo que a distancia de seguridad se refiere. 
La práctica totalidad de los premiados enviaron un mensaje de agradecimiento desde la pantalla, salvo los locales Álex González y la colaboradora del festival Patricia Porto, que subieron al estrado con su "Feitizo" gracias al Premio del Público, este año mucho más emotivo que nunca porque tras él estaba el amor de un padre, Gerardo Fernández, tallando sobre madera el galardón con el único, respetable y necesario objetivo de honrar a la figura del segundo de sus hijos, "Geri", fallecido años atrás y verdadero impulsor de la industria familiar reconvertida en fabricante de bicicletas con tan noble materia prima.  
Las palabras de los primeros -Álex y Patricia- y la posterior entrega del premio especial otorgado por la organización a la familia Fernández Pousada cargaron el lugar de emotividad, sobre todo cuando el vídeo homenaje al joven verinense finado colocó su característica sonrisa como plano final de una producción audiovisual que recordó su figura y trayectoria con varias fotografías familiares.

Se echaron en falta algunos minutos más de intervención del actor homenajeado este año por el festival, Luís Zahera, que alcanzó la popularidad -autonómica en un primer escalón- con su recordado papel de "Petróleo" en la serie emitida por la TVG "Mareas vivas". Lució, eso sí y con mucho orgullo, la careta de cigarrón entregada por la organización como reconocimiento a su trayectoria.  

"Que la cultura no pare, por favor"


Fue la gala de los escuetos y predecibles discursos. Tocaba hablar de la pandemia, y se hizo. Y de que el show debía continuar, y así fue. A la primera, y a la necesidad de mantener un ejercicio de cultura como el que ayer se clausuraba, se refirió el teniente de alcalde de Verín, Diego Lourenzo, asegurando que "a cultura nunca pode dar pasos atrás aínda que o argumento da peste fose o da nosa propia existencia nestes últimos meses", señaló, vaticinando que "seguro veremos, nesta longa vida que lle espera ao noso festival, que algunha das vindeiras curtas a concurso retratará o que vivimos neste 2020".

A cultura nunca pode dar pasos atrás aínda que o argumento da peste fose o da nosa propia existencia nestes últimos meses (Diego Lourenzo, teniente de alcalde de Verín)


Un cansado director del certamen, Carlos Montero -seguro que también por la exigencia extra que la tensión de mantener unas estrictas medidas de seguridad en todo momento le provocó-, confesó que tomar la decisión de promover esta quinta edición del certamen no fue algo fácil. Aún así, bajo el convencimiento de que "la cultura no debe detenerse", se impulsó la convocatoria este año siguiendo un estricto protocolo que garantizara la seguridad tanto de los invitados, como de los asistentes y del propio equipo organizador. "Solo los soñadores mueven montañas", afirmó Montero, haciendo suya una cita de la película alemana Fitzcarraldo. "Promover el festival en un contexto como el actual lleno de dificultades fue una verdadera odisea", añadió.

Promover el festival en un contexto como el actual lleno de dificultades fue una verdadera odisea (Carlos Montero, director del FIC)

"Y si este sueño, de darle continuidad a nuestro festival y de no detenernos, pudo materializarse fue posible gracias al trabajo y el esfuerzo de un consolidado equipo, muy implicado" y también "gracias al apoyo y esfuerzo de diferentes entidades públicas y privadas que con su respaldo apoyaron el FIC, particularmente el Concello de Verín", destacó.


Podrá, desde hoy, descansar y atiborrarse también. Apostaron entre él y el regidor verinense, Gerardo Seoane, como así éste confesó, tantas cenas como llenos -limitados- en el auditorio durante las proyecciones. Fue el propio alcalde el que certificó que serían un mínimo de seis las ya pendientes desde hoy domingo, día del cierre de las puertas del FIC.
Echaron una mano a recoger y, también a entregar, relevantes figuras políticas locales, como el subdelegado del Gobierno, Emilio González Afonso, o la alcaldesa de Oímbra, Ana María Villarino Pardo, actuando, esta vez, en representación de la Deputación de Ourense, patrocinadora del evento. Subieron también al escenario algunos de los empresarios locales, destacados apoyos del certamen, como lo son el caso de las clínicas Dentalnova. La presidenta de su Fundación, "Chus" Villar, dejó una de las memorables frases de la noche: "La cultura atrae al talento, y el talento a la prosperidad". Máxima que quizás, en el valle de Monterrei, debió aplicarse muchísimo antes a pies juntillas. 

La cultura atrae al talento, y el talento a la prosperidad ("Chus" Villar, de clínicas Dentalnova, patrocinadores de la categoría Nova del FIC


Y, así, entre premio y premio, que a continuación detallaremos, transcurrió al gala que no lo fue, al menos en la cabeza del guionista, quizás estableciendo el paralelismo con un 2020 que también semeja erigirse en un año de ensayo de cualquier otro

Palmarés
 

El Premio al Mejor Corto en la Categoría "Outra Mirada" fue para Bos, un trabajo dirigido por Steffen Geypens. Jamila, un corto sueco realizado por Sophie Vukovic, se llevó el Premio al Mejor Corto en la Categoría "Horizontes". Por otra parte, Eco -del madrileño Aitor de Miguel- fue el Mejor Corto en la Categoría "A Raia" y, finalmente, Je finirais en prison, de Alexandre Dostie, hecha en Canadá, fue distinguida con el Premio al Mejor Corto en la Categoría "Nova".

El jurado decidió también otorgar una mención especial, dentro de la categoría "A Raia", al corto Néstor, del portugués Joâo González.

Adiós a la quinta y más segura edición del FIC en una gala... ¿que no lo fue?