sábado. 11.05.2024
Jordi Montes se ordenará como fraile de la Orden Mercedaria en Verín. | FOTO: Noelia Caseiro.
Jordi Montes se ordenará como fraile de la Orden Mercedaria en Verín. | FOTO: Noelia Caseiro.

La iglesia del convento de la Merced de Verín vivirá hoy uno de sus días grandes. Jordi Montes se ordenará como nuevo fraile Mercedario y como diácono por la Diócesis de Ourense, dos actos solemnes que se llevarán a cabo por primera vez en la historia de la Merced en la villa. "Es un día muy importante para nosotros, ya que después de tres años de prueba, fray Jordi dejará de ser un aspirante para unirse a la Orden de la Merced", explica el Padre Orencio Temprano.

A las 13:00 horas se celebrará el acto de su admisión como religioso de la Orden de la Merced. Montes solicitará ante el Provincial Mercedario su unión y este será el que lo apruebe. Por la tarde, a las 18:00 horas, el obispo Leonardo Lemos lo ordenará como diácono, el paso previo a convertirse en sacerdote. "Estamos muy contentos y satisfechos de recibir a una vocación más, especialmente porque es la primera vez que tenemos ambas ordenaciones en la Merced", destaca Temprano.

Montes lleva tres años a prueba dentro de la comunidad Mercedaria, dos de ellos en Verín, y hoy culminará todo ese proceso con su ordenación. Con esta incorporación, en la villa ya serán cuatro los religiosos que forman parte de la Orden de la Merced

Es un paso cualitativo en mi vida como religioso Mercedario y en el camino hacia el sacerdocio al ser ordenado como diácono (Fray Jordi Montes, nuevo integrante de la Orden de la Merced)

El nuevo fraile, catalán de nacimiento y granadino por sus raíces, habla de la importancia de este día en su carrera religiosa y de la buena acogida que tuvo por parte de los fieles verineses en su llegada hace dos años, tras pasar uno en Salamanca. A sus 45 años empieza un nuevo capítulo, aunque en 2023 dará nuevos pasos al convertirse en sacerdote

¿Cómo se siente al dar este nuevo paso en su vida como religioso?

Me siento muy feliz porque es un paso cualitativo en mi vida como religioso en la Orden de la Merced y en el camino hacia el sacerdocio al ser ordenado como diácono. Son grandes pasos en el servicio a la Iglesia, a Dios y a Verín, donde yo estoy destinado en el convento de la Merced.

¿Tuvo siempre clara su vocación?

Sí. Desde muy joven, puede que con unos 12 años, yo sentí la vocación sacerdotal complementada con la vida religiosa. Poco a poco he dado pasos desde esa edad, el descubrimiento fue algo precoz.

¿Cómo decidió unirse a la Orden de la Merced?

Es una cuestión de vocación. Recibes la llamada de Dios a una forma de vida religiosa, que es la Mercedaria. Vivimos en comunidad y nos destinan allí donde hace falta. En el contexto de Verín, cuando yo llegué era una comunidad bastante envejecida y mi presencia sirve como un apoyo para darle un mínimo de renovación. Con el Padre Orencio, que es el más joven, me llevo 30 años y el resto son mayores, hay una generación por medio. La gente se alegra viendo que hay una cara más joven y eso les da una esperanza de futuro, dada la falta de vocaciones.

¿De qué manera lo acogieron los fieles de Verín?

Para mí ha sido una gran acogida, calurosa. Desde el principio, tanto los fieles que vienen habitualmente a las misas como el resto de la gente en general, fueron muy acogedores. Es algo que tengo que agradecer mucho, porque me han hecho suyo en cierto modo. Han sido muy comprensivos en todo, hasta con el idioma.

¿Espera poder quedarse en la villa?

En principio sí. El próximo año la Orden de la Merced de Castilla, a la que pertenecemos, tiene un capítulo provincial en el mes de junio y ahí se deciden posibles movimientos. A mí, por el momento, no se me confirmó nada y creo que estaré unos años por aquí.

NOTICIAS VERÍN | La Merced ordena por primera vez a un nuevo Mercedario y diácono