jueves. 25.04.2024

OPINIÓN | Cemento armado

Pegatinas que pudieron verse por Verín con la ya mítica frase de Jiménez tras perder las elecciones de 2015.
Pegatinas que pudieron verse por Verín con la ya mítica frase de Jiménez tras perder las elecciones de 2015.

Ha hablado el felón. Y, una vez más, lejos de ofrecer disculpas a los verinenses por otro de los errores que todos deberán pagar -recuerda al emérito: "Lo siento mucho, me he equivocado, no volverá a ocurrir"-, ha decidido, en las primeras líneas de su comparecencia, atacar a este medio de comunicación acusándole de todos sus males y de un malintencionado interés de tergiversar la realidad que sólo él tiene en su cabeza. 

Pues bien, por alusiones, y con el único ánimo de defendernos de las acusaciones que vierte sin el más mínimo rigor, quisiéramos puntualizar y, de paso, inquirir -a ver si tiene las agallas suficientes para responder una a una- al todavía líder del PP local algunas preguntas. 

En un primer lugar, a esa manifestación de "... con el periódico que financia y usa para atacar al PP...", quisiéramos aclarar al ilustre líder de la oposición dos cuestiones. La primera, que no lo financia, paga por unos servicios publicitarios y por la inclusión, entre sus bytes, al amparo de ley, de toda cuanta información que la Administración local considera es de interés público de sus administrados. Para mayor abundamiento, se sorprendería de quiénes y cuántos más son los que contribuyen económicamente al sostenimiento de este medio de comunicación. Con todo, este diario le sale muchísimo más barato a los verinenses que otros rotativos a la Deputación de Ourense o a la Xunta de Galicia. Ojalá a todos los ourensanos el primero de ellos le costase solamente un euro al año por habitante, o a los gallegos La Voz por otro tanto. 

Pero, aunque llama poderosamente la atención que nos tenga en sus plegarias ante los micrófonos de la Conferencia Episcopal y de la grabadora del diario exclusivamente ourensano desde 1910, no más lo hace la justificación que ofrece para intentar eludir su responsabilidad -y la de los suyos-, en una cuestión tan hiriente como la que nos ocupa: la de indemnizar con más de 300.000 euros a una vecina de Verín por una ocupación de terrenos que él ordenó y acabó ejecutando. 

Lejos de ofrecer cualquier tipo de punto de vista adicional, procedemos a formular una serie de preguntas que aguardamos conteste para mayor entendimiento e información de todos nuestros lectores.

Veamos:

- ¿Adoptó usted y su grupo el acuerdo de ocupación directa de esos terrenos teniendo todavía la responsabilidad del Gobierno local de Verín?

- ¿Fue o no fue declarada ilegal esa ocupación directa por los tribunales en octubre del 2015, después de que uno de los propietarios la llevase al juzgado al entender que no se le estaba indemnizando por esa usurpación y se le prometía un beneficio a futuro?

- ¿Redactó usted el plan general de ordenación urbanística de 1998? ¿Y el del 2012?

- ¿Acabaron siendo ambos anulados por el Supremo, el último porque ni tan siquiera fue capaz de justificar oportunamente los recursos hídricos para tanta vivienda como planeaba?

- ¿El abogado que tumbó la ocupación directa que usted aprobó, ordenó y ejecutó es el mismo que también se encargó de echar por tierra el PXOM del 2012 defendiendo a "un ciudadano de Madrid con intereses en Verín"?

- El anterior letrado, ¿es también el mismo que ha logrado esa millonaria indemnización y que el Concello de Verín deberá de abonar?


- ¿Ese abogado, o sea, Antonio Feijóo Miranda, es el mismo que usted ha contratado para reconducir la causa por supuesta contratación ilegal del Ejecutivo local actual?

- ¿Tiene algún interés personal en los terrenos ocupados, toda vez que la propietaria está, manifiestamente, próxima a su círculo de amistades?


Puestos a preguntar sobre posibles responsabilidades patrimoniales futuras suyas y de su grupo:

- ¿Contrató usted con la empresa responsable de gestionar el parking subterráneo que más tarde este grupo de Gobierno tuvo que rescatar?

- ¿Contrató usted con los supuestos delincuentes procesados en la operación "Enredadera", que pretendían instalar radares por todo Verín y que, tras negarse el actual Ejecutivo a instalarlos, acabó reclamando al Concello de Verín más de 600.000 euros?

Hágase un favor y decídase de una vez a disfrutar de su reciente jubilación -a la que llegó después de encadenar varias bajas médicas de discutida justificación- abandonando sus responsabilidades al frente de un partido que ha desmembrado por completo y llevado a ser la tercera fuerza política local. De paso, le dará una alegría a Baltar -padre-, 12 años después de consumarse aquella traición y dejará sin un verdadero marrón a la nueva secretaria provincial Ana María Villarino. 

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