Mini jornada de Novela Histórica, no en Verín -como cabría esperar-, sino en Villaza, en el Concello de Monterrei, y auspiciada por un establecimiento hostelero privado, O Retiro do Conde.
La que estaba llamada a ser una séptima edición de las jornadas en la capital de la villa verinesa se ha reducido a la presentación de la última obra del catedrático cordobés y exalcalde de su localidad natal -Cabra-, José Calvo Poyato: "El rey regente". Le acompañó en la mesa el modisto verinense Roberto Verino, que ofició de presentador y de casi cicerone, no solamente porque convidó a uno de sus vinos, sino porque también fue el primero en poner en valor la historia de la comarca y reclamar, como siempre lo hace, un mayor sentimiento de país, que "ya pedía para nosotros el profesor Jesús Taboada Chivite, al que yo le tengo una gran admiración y que siempre nos recordaba que debemos sentirnos orgullosos del lugar en el que hemos nacido".
Verino insistió en su teoría, ni demostrada ni contrarrestada, de que Viriato nació en estas tierras, poco antes de lanzarle una pregunta directa al regidor verinense, también presente en primera fila, Gerardo Seoane; interesando una futura celebración de las que serían las VII jornadas de Novela Histórica en Verín, a lo que el alcalde respondió que "se celebrarán".
La historia de España es extraordinariamente rica, tiene sus luces y sus sombras, pero siempre nos hemos fijado mucho más en las sombras, nosotros y los foráneos
Llegó el momento de los agradecimientos y la introducción del verdadero protagonista de la tarde, Calvo Poyato. El autor comenzó dando una breve pero interesante lección de la complejidad que supone escribir una novela histórica: "A poco que se sepa algo de Historia, el lector sabrá como va a terminar el libro. Precisamente ahí está la gran dificultad de este género, en conseguir atrapar su interés para que siga leyendo. ¿Os imagináis iniciar una novela policiaca conociendo nada más comenzar quien es el asesino? Pues, eso precisamente, es lo que ocurre en la histórica, que además tiene como uno de sus requisitos fundamentales ser fiel a los hechos", señaló José Calvo.
El catedrático cordobés también incidió en la idea adelantada por Verino, de la falta de sentimiento de país y de reconocimiento de nuestra propia Historia. "La de España es extraordinariamente rica, tiene sus luces y sus sombras, pero siempre nos hemos fijado mucho más en las sombras, nosotros y los foráneos. Desde 1592, año en el que el Padre Juan de Mariana escribe su Historial General de España, tuvieron que pasar otros 270 para que se volviese a reescribir, con Modesto Lafuente, en 1860. Entre medias, ¿quién habló de nosotros? Nuestros enemigos... Ingleses, franceses o holandeses, que como eran incapaces de vencernos en el campo de batalla y veían el gran avance de las conquistas españolas por el mundo, utilizaron la propaganda para combatirnos", explicaba.
En la obra se narra el encuentro que el Cardenal Cisneros y Felipe "el Hermoso" mantuvieron en Verín, en 1505
Después de esa académica introducción, José Calvo comenzó a situar un poco más su obra: "El Rey Regente transcurre entre los años 1504 y 1516, esto es, el periodo que va desde la muerte de Isabel I la Católica y la de su esposo Fernando. Me interesaba ese periodo porque, hasta entonces, Fernando estuvo absolutamente anulado, oscurecido por la fuerte y arrolladora personalidad de su mujer, y yo siempre defenderé que él fue el político español más importante de la Historia, capaz de anticiparse a los hechos, como así demostró con su matrimonio con la sobrina del rey francés, Germana de Foix, conteniendo el riesgo que podrían suponer los galos para la corona de Aragón".
También Verín y Villaza tienen su protagonismo en la novela presentada este jueves en O Retiro do Conde. Con un agradecimiento expreso a los responsables de la biblioteca municipal, Vicente Rodríguez Justo y Aurora Prieto Tarrío, Calvo Poyato recordó que tres de las páginas de su última obra narran el encuentro que el Cardenal Cisneros y Felipe "el Hermoso" mantuvieron en Verín, en 1505, cuando el primero intentaba mediar con el segundo y el suegro de éste, Fernando II.
"Son diez, once años verdaderamente apasionantes, donde se mezcla un fidedigno relato de los hechos históricos, con el protagonismo que cobran algunos personajes que yo sí puedo dominar a mi antojo porque los he creado; como Rodrigo de la Cuesta, que no existió nunca, pero que en 'El rey regente' tiene encomendada la labor de localizar el testamento de Enrique de Trastámara, Enrique IV, hermano paterno de Isabel la Católica, y en el que podría recogerse un dato que quizás hubiese cambiado la historia de este país... Pero para eso tendrán que leerse la novela y saber si Rodrigo lo acaba encontrando o no", afirmó.
El acto concluyó con un pequeño ágape a base de las empanadas de Panadería Germán -otro clásico ya de la Novela Histórica en Verín- y vino, como no, de Terra do Gargalo. Y todo, en el incomparable marco de O Retiro do Conde.
