La asociación Pro Animales Verín tiene una historia bonita para contar. Después de diez años de búsqueda, los dueños de un perro perdido lo pudieron encontrar gracias al chip. "Es una tristeza que haya pasado diez años en la calle teniendo unos dueños, pero ellos están muy felices de haberlo recuperado", señala Veves Gascón, portavoz de la asociación.
El perro era conocido, ya que vagaba por Mandín abandonado. Muchas veces se le intentó ayudar, pero no se dejaba tocar ni coger de ninguna forma. Los vecinos lo alimentaban y contaba con la compañía de otra perra que siempre lo acompañaba, pero que tampoco permitía que las personas se le acercasen. Finalmente, el perro perdido se puso enfermo por una lesión en una pata y ahí fue cuando intervino Pro Animales.
El perro estaba débil a causa de la infección y por ello se dejó rescatar. Lo llevaron al veterinario para curarlo y ahí descubrieron que tenía chip, por lo que pudieron identificar a sus dueños. La sorpresa vino cuando se enteraron de que la familia llevaba diez años buscándolo en perreras y protectoras. "Cada vez que veían un perro negro iban a mirar si era el suyo, pero sin suerte. Después de tanto tiempo ya pensaban que estaría muerto", cuentan desde Pro Animales.
La fortuna quiso reunirlos, aunque la salud del pobre perro se ha deteriorado mucho. "La primera vez que lo vimos ya nos dijeron que tenía la pata rota hacía algunos años, lo habían atropellado y se le había curado sola", explica Gascón. Ahora se encuentra recuperándose con su familia, que reside en Portugal, y le darán mucho amor. "La dueña ya nos dijo que le iba a dar cariño todo el tiempo que le quedase de vida", recuerda Gascón.
Los propietarios le contaron a Pro Animales que creen que su perro fue robado, "que su vida era feliz y la persona que se lo llevó para acabar abandonándolo, se la ha destrozado". Después de una década en la que no se sabrá cuántas cosas tuvo que vivir el animal, disfrutará del calor de un hogar nuevamente con su familia, donde también tenía a una hermana. "El reencuentro estuvo lleno de emoción y lágrimas. Solo nos queda alegrarnos porque ha vuelto a su hogar", celebran desde la protectora.