A estas alturas, si no estuvieran las restricciones y medidas impuestas para controlar el Covid-19, Laza celebraría por todo lo alto el Lunes "Borralleiro". Este es considerado como uno de los días grandes del Entroido en este municipio, teniendo como protagonista a la "Farrapada", una batalla de trapos cubiertos de barro. Sin embargo, este año, para evitar aglomeraciones, no se pueden realizar estas tradicionales actividades, lo que no ha impedido a algunos vecinos, desoyendo toda recomendación sanitaria de no celebrar fiestas populares y tradicionales, salir a festejar a la plaza de A Picota. Lo hicieron, eso sí, ante una fuerte -y lamentable- presencial policial -con un estado de alarma todavía vigente-, que intentaba que al menos las medidas de separación entre los que allí se dieron cita se mantuviesen. 
Vecinos de Laza en la plaza de A Picota. | FOTO: Xosé Lois Colmenero.
Tras la salida de los Peliqueiros el día anterior y la consiguiente acumulación de personas, las fuerzas y cuerpos del estado se han movilizado para impedir, a toda costa, que se hagan todo tipo de celebraciones populares. Por ello, desde primera hora de la mañana permanecen en la plaza, asegurando el cumplimiento de las normas.
La actitud de varios vecinos de Laza les ha valido, en las redes sociales, una amplia contestación social de otras localidades vecinas que, con un espíritu "entroideiro" similar o incluso superior, mantuvieron a raya las celebraciones propias del Entroido.
