Quizás pueda ser un efecto colateral de los casi ya dos años de pandemia que sufrimos y este incipiente trastorno tenga cura en cuanto los bares vuelvan a llenarse de sonrisas al viento.
Cabe también la opción -apuesto más por esta última-, que al igual que otros tiran por adicciones más convencionales, los más "raritos" experimentemos apegos tales como el de no perderse un pleno en Laza.
No solamente me confieso adicto, sino que también un servidor ha adquirido cierto compromiso social con todos aquellos que aguardan la crónica del día después de otra sesión municipal en tierra de peliqueiros. Hasta el propio regidor, al término de la misma, solicitó públicamente comisión por los rendimientos que este pequeño y apresurado resumen pueda reportar (realmente se la merecen).
Conste que el de este jueves permitió llegar a casa no a la hora de la merienda, como ya don Jesús nos tiene acostumbrados. Pero no por ello la sesión decayó en jocosidad y algarabía.
Se discutió desde el sexo de los angelitos -todo un clásico ya- hasta si Laza era un desierto -declaración de Blanco Conde- o si, por el contrario, su definición se acercaba más al de selva amazónica -réplica de Moncho Barreal-. Y, por supuesto, con un secretario como ya un espectador más de este particular club partiéndose la caja tras la mascarilla, quedó de nuevo patente que el divorcio de PSdeG y Xuntos ("as Mareas" para don Jesús) no tiene viso alguno de fogosa reconciliación. Aún así, esta vez reinó cierta cordialidad en el turno de preguntas, dejando el socialista que fuese Lorenzo Vila el que iniciase la batería de ellas: "É que as miñas son máis curtas" -damos fe-.
Y, por supuesto, no pudo dejar de salir a escena el ya verso suelto del grupo municipal socialista: Ricardo Sobrino. Lo hizo por partida doble, primero votando en contra de la, seguro, disciplina impuesta por don Jesús, que recomendaba la abstención de su formación en el punto por el que se aprobaba la adhesión al nuevo marco regulador del Grupo de Emergencias Supramunicipal, que pasa de seis a 12 miembros para gozo de su alcalde y también de los representantes de Xuntos por Laza.
Más tarde, y aprovechando que don Jesús había cogido carrerilla batiendo en cobre contra Barreal -ese monumento que levantou na finca das Bacallanas, para que? Ehhh? Para que?, clavando su mirada en el regidor con la FFP2 desencajada-, el escudero de Blanco se lanzó a la yugular del primer munícipe. Su ejecutoria es siempre la misma: solicita mansamente poder formular una pregunta; Barreal Novo levanta la vista al Altísimo monarca que preside la sala en un lacónico "Señor, señor, llévame pronto" para sus adentros, y le concede el turno. El zasca, rotundo, no tarda en llegar. Con una justificación poco definida -la pregunta también-, Sobrino levanta vuelo y bien alto y claro le espeta al popular: "Usté é o rei das mentiras, que incluso lle anda dicindo aos seus funcionarios e empregados que para traballar neste concello teñen que aprender a contalas. Anda sempre ao seu rollo", sentencia Sobrino. Barreal Novo, curtido y sereno, deja otra de las máximas para los anales: "O que me facía falta, que en vez de andar ao meu rollo, andara ao rollo que queren os outros".
Y, así, entre algunas píldoras que despertaban a teniente Víctor de su intermitente sueño, se ventiló un pleno en el que, como principales acuerdos, se adoptaron, con el ya mencionado voto diverso de los socialistas -abstención más otro en contra- y el apoyo de PP y Xuntos; el contar con seis nuevos componentes de los GES, que permitirá al servicio de emergencias local convertirse en sede -antes tenía la calificación inferior- y permanecer las 24 horas de los 365 días del año alerta. Además de que sus ya integrantes vean como sus próximas nóminas recogerán la nada despreciable subida del 14,8 por ciento.
Conectando Laza a la A - 52
Unánime fue también el voto para la moción presentada por el PSdeG, solicitando que el plenario dispusiese lo preciso para pavimentar una pista forestal que conecta Laza con Cualedro por Baldriz y que, con asfalto, podría suponer un ahorro de tiempo considerable para todos aquellos que decidiesen entrar o salir del municipio, porque, una vez más y con su sabia retranca, Barreal Novo precisó: "Igual que vale para entrar - adhiriéndose a la justificación del ponente don Jesús, mejores conexiones mayor atracción del rural-, tamén pode valer para marchar". Aún así, fue el regidor el que cifró en 600.000 euros el presupuesto necesario para esa infraestructura, que pretende financiar, entre otros, con fondos del IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía de España), siguiendo el ejemplo "do bo facer do Concello de Verín, que lle permitiu levantar unha estrutura coma a ponte sobre o Támega en Queizás con cartos dese instituto", apuntó.
