Los hermanos Domínguez Rosas llevan casi 25 años al frente de la Carpintería CMD; situada en la Avenida de Laza 128, de Verín. Una tradición familiar que comenzara su padre, carpintero desde los 14 años, y que, en 1998, les llevó a abrir su propia carpintería en honor al esfuerzo y trabajo de su progenitor. Desde entonces, Carpintería CMD mantiene la misma filosofía: hacer trabajos en madera a medida, con materiales de alta calidad y ofreciendo un trato personalizado a su clientela.
El resultado son muebles exclusivos y artesanales que se hacen a medida de las necesidades de su clientela. No tienen exposiciones de muebles "porque cada trabajo es único, nos desplazamos al domicilio para diseñar lo que quieren y asesorar a nuestros clientes", afirma Miguel, "para nosotros es importante aconsejarles, explicarles las ventajas e inconvenientes de cada material y de cada diseño".
En Carpintería CMD están especializados en todo tipo de trabajos en madera, tanto de interior como de exterior. Cocinas, armarios, escaleras, tejados, vestidores, puertas, parqués, pasamanos y suelos, entre otros.
"Somos artesanos de la madera, hay muchos materiales con los que no queremos trabajar porque no ofrecen calidad", asegura Miguel. Son conocidas sus reformas integrales en madera: tejados antiguos y artesanales que recuperan su esplendor o parqués deteriorados que vuelven a lucir como en sus mejores tiempos.
En estos años, han conseguido una relación casi familiar con su clientela gracias a su buen hacer y a la honestidad de su trabajo. "Estamos tan interesados como nuestros clientes en hacer las cosas bien, con calidad, porque son nuestro mejor escaparate y es una satisfacción personal ver que tenemos las puertas abiertas de sus casas", continúa Miguel Domínguez.
Sus trabajos se adaptan a las necesidades de sus clientes, realizando diseños propios que respondan a las exigencias de su clientela con el fin de garantizar la durabilidad y funcionalidad de sus trabajos. "Nuestro nombre, CMD, significa Carpintería Miguel Domínguez, por nuestro padre", continua Miguel, lleno de orgullo de hijo.
