Un varón de 37 años fue interceptado este pasado domingo camino de Francia por agentes de la Guardia Civil de Tráfico, que realizaban controles rutinarios propios de la situación de Estado de Alarma en la rotonda de Queizás (Verín), con evidentes signos de haber consumido sustancias estupefacientes.
En el momento de la identificación del conductor, un ciudadano portugués y residente en Francia que se dirigía al país galo para reincorporarse a su puesto de trabajo, los números de la Guardia Civil observaron posibles signos afines de haber consumido drogas.
El test indiciario de las mismas al que fue sometido acabó confirmando las sospechas de los agentes.
Se hizo cargo del automóvil su acompañante y se tramitó la oportuna denuncia contra el conductor interceptado.
