De todos es sabido que las intervenciones en el pleno de la Corporación municipal verinense del anterior alcalde, y actual líder de la oposición, Juan Manuel Jiménez Morán, son notoriamente soporíferas. Su labor de oposición se basa, fundamentalmente, en transcribir los informes de los técnicos habilitados -cuando reman a favor- y de incorporar alguna que otra reflexión de su propio intelecto para intentar explicar el farragoso lenguaje que se gastan los interventores, el del saliente mucho más que el de su sustituta en acumulación.
Todos, servidor incluido, sufre de manera estoica sus interpelaciones, intercambiando algún que otro mensaje de Whatsapp en medio con un tercero -presente o no en la sala de tortura-. Sin embargo, la profesión obliga a un mínimo interés en el acto en sí, porque el líder opositor tiene a bien no considerar a este medio digno de recibir sus correos electrónicos con los textos expuestos en los diferentes plenarios.
Jiménez Morán, releyéndose el pasado 30 de diciembre de 2020. | FOTO: Iván Iglesias.
Y en ello estábamos a eso de las 9:40 horas del pasado 30 de diciembre del 2020, momento en el que todos nos atábamos los machos para escuchar la incisiva, coordinada y certera crítica de Jiménez Morán a la intervención del teniente de alcalde y portavoz municipal, Diego Lourenzo, de justificación de los presupuestos del 2021 presentados para su sanción. Llevaba el popular poco más de cinco minutos de exposición y llega el primero de los déjà vu: "Que digan que Verín se recupera económicamente después de sus casi 5 años de gobierno BNG+PSOE es asombroso... (...)"... El sueño era mucho, el tono del locutor cansino, pero la mínima atención que servidor prestaba a su diatriba conectó con algún lugar de la memoria en el que estaba guardado un discurso similar. Y, ¡en efecto!, rebuscando en los archivos del Concello, localizamos el acta del pleno del 30 de enero del 2020, en el que se debatían los presupuestos de ese año, y, curiosamente, a los pocos minutos de la intervención de nuestro protagonista aquel día -en el debate presupuestario del ejercicio 2020-, hete aquí que hallamos, en el último párrafo de la página 8 de esa acta, la misma literalidad. ¡No podía ser cierto! Incluso me giré hacia el actual jefe de prensa e improvisado operador de cámara que retransmitía el pleno de diciembre para cuestionar si recordaba haber oído algo parecido meses atrás.
Primera de las coincidencias en las intervenciones del popular Jiménez. | FOTOMONTAJE: Iván Iglesias.
No tardé a responderme a mí mismo a medida que el líder del PP se lo curraba leyendo. Unos tres minutos más de avance en la lectura, ¡y un nuevo párrafo calcado de un acta anterior! En este caso, la exposición era un ataque directo a la edila de personal -la delgada Rosario Rodríguez- y que comenzaba tal que así: "Han pasado 5 años y aún no fueron capaces de hacer nada en la negociación colectiva con los sindicatos y trabajadores... (sigue así Jiménez durante más de un folio plagiándose a sí mismo, pueden comprobarlo en la imagen posterior de las páginas 15 del acta del 30 de diciembre y 9 del documento resumen del 30 de enero, ambos de 2020).
Jiménez Morán es el boss de los comandos Ctrl+C y su sucesor Ctrl+V.
Podría seguir aburriéndoles, pero no quiero parecerme a él, y mucho menos repetirme. Lo cierto es que hasta en otras cinco ocasiones más -en el fotomontaje que se acompaña no están todas-, el portavoz popular decidió plagiarse a sí mismo, replicando su intervención del pleno de los presupuestos del 2020 del 30 de enero de ese mismo año, como si nada hubiese cambiado en esos once meses. Sí tuvo a bien, evidentemente, corregir algunos pequeños detalles -las cifras, que sí cambiaban-, pero no quiso privar al respetable -sus otros tres ediles, el resto de miembros de la Corporación, la secretaria, el operador de cámara y un servidor, amén de los televidentes- de su ya carismática frase con la que concluye su discurso para todo pleno de presupuestos que se tercie, sean del 2020, 21 o 33: "Así que menos anuncios rimbombantes y falso, más control del gasto, más gestión y creación de empleo, porque de fiestas y folclores y promesas los verinenses no viven".
