Según ha podido saber Diario do Támega, el jefe del Servicio de Obstetricia y Ginecología del Hospital de Verín, Javier Castrillo, ha impedido este mañana que la pediatra contratada y encargada de supervisar la evolución del último bebé nacido en Verín acatase la orden recibida desde el CHUO de trasladar, sin clínica y motivación que lo justificase, al neonato nacido ayer sábado a las 8:30 horas en el centro hospitalario verinense.
Esta misma mañana, y después de haber transcurrido la noche sin incidencia alguna, la responsable última de la salud del recién nacido se disponía a comunicar a la familia el traslado a Ourense siguiendo indicaciones de su jefe de Servicio, Santiago Fernández Cebrián. Los temores que los padres le habían manifestado a los abuelos del penúltimo bebé nacido y también trasladado a las 3:30 horas del pasado jueves comenzaban a hacerse realidad. Su niño sería derivado a Ourense sin una clínica que justificase un desplazamiento a tan temprana edad y a primera hora del domingo. El doctor Javier Castrillo, que tuvo conocimiento de la decisión pocos minutos después, se personó de manera inmediata en el lugar e impidió, por el momento, que se ejecutase el traslado del neonato, al menos hasta las siete de la tarde.
Si el bebé se trasladaba, la guardia de la pediatra enviada desde el CHUO finalizaba, al justificarse su estancia en el hospital de Verín nada más que para supervisar la evolución del último bebé llegado al mundo en las instalaciones del paritorio verinense.
